No me podía imaginar lo que me ocurriría esa mañana, iba dando una vuelta cuando pude observar como el "Super Maligno" estaba robándole el dinero a una familia pobre que vive cerca mía. Tuve que enfrentarme a él, no lo dudé ni un solo minuto. Agarré mi larga melena con un coletero y con mi fuerza vital lo destruí.
Era necesario hacer eso ya que llevaba haciendo daño y molestando a los más desfavorecidos.
Nada fue más gratificante que la cara de felicidad de esa familia al ver que ya no tendrían que sufrir más por ello.
Patricia (voluntaria de la UCA)
poca cosa, esperamos más de ti, Miriam... jejeje
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